Vans Authentic. Las clásicas, las de siempre. Las crearon los hermanos Van Doren en California. Es una marca que surgió por el skate.
Lo que más me gusta de esta zapatillas es su simpleza. Eso la hace ser auténtica. Tienen 30 años de estar de moda y jamás pasarán. Es un básico que debemos tener todos los amantes de las zapatillas.
Observaciones: Llevo usando esta zapatilla hace más de 10 años. Siempre que compro unas nuevas mi pie pasa por lo mismo. Al ser tan planas y duras mi talón sufre hasta que pasan unas semanas y se van amoldando. Después de ese tiempo son las zapatillas más cómodas para usar a diario. Aguantan muy bien. Aunque debo decir que siempre se dañan en los mismo sitios en la zona donde articulas el pie. No son ligeras.
vs.
Superga 2750. Vienen de Turín, Italia. Superga es el nombre de una iglesia a los alrededores de Turín. Su campaña de marketing ha sido tan potente que se ha convertido en referente de la moda sport. Es una zapatilla sencilla, femenina y con estilo.
Observaciones: A diferencia con las Vans, son cómodas desde el primer momento. Las he estado usando ya hace unos meses y no se me han roto en los costados. No son ligeras. El único problema es que las he lavado y han encogido. Cuidado con eso.
Aquí os dejo fotos.
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